Qué fue el accidente Gremios en la cara norte del Monte de Espina
El 25 de julio de 2003, un grupo compuesto por cinco alpinistas belgas caían desde una pared vertical de más de 500 metros dentro de los parques nacionales de Picos de Europa y Cuenca Alta del Nervión, en Asturias. Este accidentado evento llevó a la pérdida de tres vidas e hirió gravemente a otros dos, uno del los cuales fue un guardia civil.
La caída fatal ocurrió cuando el grupo de alpinistas intentaba alcanzar la cima del Monte Espina por una ruta conocida como la cara norte. Esta ruta es considerada especialmente complicada debido a su inclinación pronunciada y la posible presencia de rocas estables y hielo en la pared vertical. Es importante destacar que los alpinistas belgas habían planificado su ascenso con anticipación, pero parece ser que subieron por una ruta más arriesgada y poco habitual.
Se ha investigado posteriormente cómo el grupo alcanzó la fatal caída, sin embargo la investigación fue inconclusiva. De cualquier manera se supo que el incidente ocurrió cuando los cinco alpinistas intentaban escalar la cara norte del monte Espina por una ruta poco usual.
La caída y su consecuencia
El desastre ocurrió cuando uno de los miembros del grupo de alpinistas, cuyo nombre fue identificado como Jesús Ariño, tuvo un accidente fatalmente mortal. Fue la primera víctima mortal en este accidente fatal. Además también hubo que lamentar la muerte de otros tres amigos. Los cuerpos cayeron hacia abajo por una pared vertical de más de 500 metros y provocaron desplomes masivos que llevaron a la caída al resto del grupo.
Dos horas después del caídas, los rocas se estaban aún cayendo debido al peso muerto creado con el accidente. Al hacerlo creó una avalancha de rocas y hielo que arrastraron consigo otros dos hombres más cercanos a ellos en el mismo punto. Los alpinistas sufrían como resultado del desempeño de las rocas enormes que no tuvieron piedad hacia los cinco del grupo de escalar.
Según informacin posterior, la fuerza con que caían las rocas de escombros superaba fácilmente a un árbol alto de 30 metros debido al peso. Los guardias civiles se vieron imposibilitados para acudir rápidamente por lo complicado del lugar ya que se ubicaban justo debajo de la roca donde cayeron los cuerpos arrastrando consigo rocas más.
El impacto en la comunidad
El accidente fue un golpe devastador no solo para las familias de los alpinistas afectados, sino también para la comunidad local y la sociedad en general. Los parques nacionales de España se ganaron una mala reputación debido a este suceso que hizo escabullida la estabilidad de las rocas de los montes.
La pérdida de vidas humanas y la lesiones suficientemente graves, especialmente a guardias civiles fueron un duro recordatorio sobre los peligros inherentes a actividades como la alpinismo en áreas naturales complejas. Después del suceso varias personas condenaron los acontecimientos ocurridos allí.
En el ámbito local se vieron afectados los habitantes cercanos debido a que estaban pendiente de saber si alguien más había muerto por rocas y piedras arrastradas al suelo en un movimiento violento, sin embargo gracias a la rápidas gestiones del cuadrilátero no hubo pérdidas de vida en todo esta.
La investigación posterior
Tras el accidente, las autoridades lleva cabo una exhaustiva investigación con colaboración del cuadripolo y se encaminó a buscar detalles más completos sobre la caída ocurida la cual fue causa del fallecimiento por las caídas de estos cinco en un lugar sin muchísimos detalles debido al desastre ocurrido.
De todo lo investigado llega la idea general que el evento podría haber sido motivado por factores climáticos como la tormentas o por la presencia de rocas estables y hielo en la pared vertical del monte Espina.
En los momentos posteriores al accidente, las autoridades instaron a tomar precauciones adicionales para evitar semejante acidente. Además, se realizaron revisiones rigurosas en otras zonas vulnerables con el fin de brindar una mayor seguridad a futuras actividades alpinistas.
Además, se establecieron nuevas reglas y pautas en todo lugar donde la actividad del alpinista lo permitía dentro de los parques nacionales de Picos de Europa y Cuenca Alta del Nervión para tomar más medidas de precaución como se había previsto desde un buen principio.
Conclusión
El accidente de Gremios en la cara norte del Monte Espina fue un desastre trágico que tuvo consecuencias graves para las personas afectadas y su familia, así como impacto en la comunidad local. Este incidente servirá una advertencia a los alpinistas sobre los peligros de las actividades extremas y la necesidad de precauciones adicionales cuando se trate de explorar áreas naturales complejas.
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