Cómo mantenerse en Buena Forma durante la Navidad sin exigencias

La Navidad es una época del año en la que todos estamos pendientes de preparar los regalos para nuestros seres queridos, las fiestas con amigos y familiares, los postres y aperitivos irresistibles... Y en este contexto de alegría y celebración, es muy fácil dejar a un lado nuestros buenos hábitos, incluyendo la actividad física y una alimentación saludable. Sin embargo, mantenerse en buena forma durante estas fiestas no tiene por qué ser una imposición extrema o desagradable. Al incorporar algunas rutinas diarias de actividad moderada, mejorar el equilibrio entre la alimentación y los gustos y asegurar que se duerme bien cada noche para recuperar energías, ¡podremos disfrutar de las fiestas sin renunciar a nuestra forma habitual!

En primer lugar, es importante recordar que el objetivo no tiene por qué ser llegar a un estado de condición física superior, sino simplemente seguir viviendo un estilo de vida equilibrado y saludable en la que se permita al cuerpo algunas indulgencias ahora y entonces. Esto significa introducir actividad gradualmente cada día, hacer algunos ejercicios fáciles como una caminata por fuera del hogar o los calentamientos en casa para evitar daños musculares; es decir, sin forzar el ritmo demasiado.

Algunas de las opciones de actividad que se pueden aprovechar durante esta época son correr, nadar o hacer una buena rutina de yoga. Todos están bien y, mientras los disfrutes, te resultará mucho más fácil concienciarse sobre tus hábitos alimenticios y, a la vez, no sacrificar un poquito de placer. Además, por supuesto, es fundamental prestar atención a lo que comes.

Mantener una buena alimentación saludable

Cuando se trata de la alimentación, la clave para mantenerse en buena forma durante las Navidades sin exigencias consiste en ser conscientes de nuestros hábitos actuales y llevarlos un paso más allá. Si, por ejemplo, nos gustan los postres fáciles en casa, una o dos veces por semana puede ser perfecto, mientras que otros días podemos optar por realizar recetas caseras con ingredientes saludables como frutas secas al natural o verduras variadas frescas de temporada.

Por lo tanto, el objetivo es encontrar un equilibrio entre satisfacer los deseos culinarios y comer en su mayoría alimentos naturales. Por ejemplo, puedes preparar tus propios bizcochos caseros con menos azúcar que en las tiendas, o preparar diferentes aperitivos saludables como una zanahoria ligeramente asada al horno con un pescado marinado al vinagre. Es un compromiso entre disfrutar de la vida y no desaprovechar nuestra condición actual.

Cocinar de manera casera siempre es una buena solución, pero no siempre hay tiempo o ganas de hacerlo todos los días. Por lo tanto, en caso de que tengamos que comprar algunos preparados de repostería, podemos escoger las marcas que contengan ingredientes naturales sin aglomeraciones aditivas ni edulcorantes artificiales, como zúcar o azuurr. A través del consumo balanceado y consciente, podremos disfrutar de cada momento festivo sin sentir culpa.

Dormir bien: la clave para mantenerse en buena forma

Para mantenerse en buena forma durante los días navideños, otra cosa crucial es dormir lo suficiente o intentar concienciarse sobre este punto. Lo sabemos todos: el sueño es fundamental tanto para el cuerpo como para tener una mente alerta y despierta. Y la Navidad, con toda su emoción y la obligación de quedarse hasta tarde después de cada fiesta puede llegar a ser un escenario complicado para lograrlo.

En este contexto, una buena manera es acostumbrarnos desde antes. Así podemos asegurar que nos durmamos lo suficiente por anticipado a las celebraciones y también nos permita disponer sobre el uso más productivo de nuestro tiempo después del desayuno al día siguiente. Lo mismo se aplica si tuviera una larga jornada laboral en un lugar remoto lejano a finales de semana; lo importante es que prioritzemos nuestra recuperación física para mantenernos en buena forma durante la * época festiva*.

El objetivo es encontrar formas prácticas y sencillas de equilibrar entre el descanso nocturno adecuado con las actividades festivas, sin renunciar ni fallar en alguna de las dos. Dicho esto, intentemos concienciarnos durante la Navidad del valor crucial que tiene nuestro sueño para un equilibrio saludable y disfrutar cada momento de esta época alegre.

Incorporando actividad física saludable

Cada uno necesita su propósito personal, por eso el ideal es escoger actividades moderadas y hacerlas de manera gradual al iniciar los días. Por lo tanto, no hay nada que nos impida intentarlo mientras estamos en las fiestas navideñas. Así como también podemos introducir pequeños cambios positivos para mantenerse activo a nuestra alrededor.

Por lo tanto, si nos gusta caminar por el bosque de vez en cuando, este puede ser uno de nuestros objetivos durante la * época festiva*. Esto siempre forma parte de todo nuestro plan personal a largo plazo y permite darnos algunos descansos de vez en cuando para recuperar energías e incluso disfrutar algunas actividades que otros hemos programado con anterioridad.

A pesar de que las celebraciones navideñas son una oportunidad perfecta para reencontrarse y realizar nuevos planes, no nos olvidemos también de tomar medidas de protección a la hora del sol o el frío si es necesario. Por ejemplo, puede resultarnos conveniente usar ropa más cálida de lo usual cuando salgamos por caminatas frías durante las mañanas de invierno; esto nos ayudará evitar posibles dolores músculo entre los huesos.

Evitar excesivos contenidos azucarados

¿Qué se espera cuando una persona es visitada a casa durante la * Navidad*? Algo de dulce que acompañen las comidas, claro está. Sin embargo, si estamos intentando seguir en buena forma, resulta muy complicado evitar completamente los postres fáciles, especialmente si estos forman parte de nuestro cariño por nuestros invitados.

Por lo tanto, y para encontrar la equidad exacta, siempre tenemos la opción de sacar recetas caseras saludables para compartir en compañía. Y para empezar con un ejemplo muy básico: los bizcochos de trigo integral no necesariamente van a causarnos tanto daño como una torta o cualquier otro postre rico si solo llegamos a comernos menos cantidades y solo cuando sentimos ganas reales.