Quién fue Linford Christie y su innovador stunt con Puma

Linford Christie es un velocista británico-jamaicano que se destaca por ser un atleta versátil y habilidoso. Su talentoso rendimiento en varias competiciones internacionales lo colocó entre los mejores corredores del mundo, incluso logrando ser campeón de Europa en 1990.
Desafortunadamente, su carrera estuvo marcada por varias polémicas y cuestiones que afectaron directamente a su imagen pública. Algunos de estos sucesos fueron consecuencia de sus propias acciones e incoherencias, mientras otros se produjeron debido a los conflictos con otras personalidades o entidades competidoras.
En 1996 ganó la medalla de plata en los Juegos Olímpicos de Atlanta después de resultar segundos en 100 metros planos. Su desempeño fue de destacar, no tuvo grandes problemas a la hora de disputar la carrera y llegar en las mejores posiciones.
Sin embargo, esta medalla fue solo una de las últimas proezas que realizaría Christie antes de su retirada de los deportes. En esos momentos Linford ya había dado muchas vueltas en la historia del atletismo moderno y el mundo deportivo se lo estaba recuerdo con cariño aunque también le recordaba por sus constantes polémicas.
A pesar o precisamente a causa de todo ello, su vida ha sido plena de acontecimientos e incluso de desafíos personales. Por supuesto que uno de estos más destacados fue el stunt que llevó a cabo con la marca de ropa deportiva Puma, evento que alcanzó un gran impacto en los medios internacionales.
Antes y después de su renuncia a los deportes Christie ha tenido varios rollos importantes. En una oportunidad tuvo éxito como comentarista televisivo en el canal británico BBC Sport.
Christie también tiene participación, o más bien influencia en algunas organizaciones que defienden a sus compañeros atletas y corresponsables en este ramo deportivo. Un ejemplo concreto es la OPA (Oficina Protección Atleta) que se ocupa de la supervisión o protección a los atletas que tienen problemas laborales derivados del abuso o cualquier menoscabo por parte de sus entrenadores.
El stunt con Puma

Una de las acciones más destacadas que protagonizó Linford Christie fue su inconfundible y recordado stunt con Puma antes de finalizar la rueda de prensas, en Atlanta en 1996. Antes de que terminara la rueda inicialmente organizada por los medios y organizadores de la competencia internacional, Linford apareció nuevamente ante ellos.
Esta vez tenía unas lentillas negras con un gran logotipo de Puma impreso en ellas. Las lentillas rápidamente se hicieron notar debido a que sus características permitían ver las reacciones tanto emocionales como verdaderas de Linford frente al público que en ese momento llenaba los pasillos de la prensa.
Algo que más llamó la atención fue que las lentillas negras con el logotipo del conocido proveedor de productos deportivos Puma, lograron llamar más espectadores por su gran sensación y originalidad a pesar de la polémica rechazo generalizado contra estas. En cuanto Christie se atrevió nuevamente a subir en los márgenes informativos del centro de atención y confirmó ante una multitud que, realmente, el proveedor del modelo de lentillas negras era Puma.
El stunt exitoso, de mucha tensión, le valió al recordado campeón olímpico de oro, una gran popularidad en todo el planeta, por sus valientes acciones. Sus seguidores más grandes admiraron este gesto audaz y enigmático e hicieron saber públicamente que se sentían muy orgullosos de su atreveimiento.
En ese instante la historia y la vida de Linford Christie, el recordado velocista británico-jamaicano, tuvo un punto importante de inflexión. A partir del entonces famoso acontecimiento público, su nombre comenzó a sonar más en conversaciones internacionales e incluso fue motivo para que diversos medios se preguntaran cómo era posible llevar a cabo una acción así y obtener la reacción tan única y impactante ante los ojos de tantas personas un poco dispersas allí presente.
La controversia
Linford Christie logró su famoso stunt publicitario en las calles del centro de atención principal que se ubicaba dentro de los pasillos de la prensa, con sólo unos pocos días antes de su gran encuentro olímpico por el oro del 100 metros. Mientras tanto, Linford sabía a ciencia cierta que estaría ante unas miradas inusitadas y diversas después de ver su atrevida e intrigante gesto.
Para entonces era una persona muy famosa pero que ya tenía varios problemas en la cara gracias al escándalo por tráfico de drogas. Este fue uno de los aspectos realmente más negativos en toda su vida, el problema de adicción consumió gran parte de su juventud mientras que a las personas lo recordaban como una persona valiente y segura.
Así, no es exagerrar mucho afirmar que la mala fama tuvo un efecto devastador sobre su imagen pública y también en su carrera deportiva. Con el tiempo se llegó a enterar de nuevas informaciones e incluso algunas personalidades expresaron opiniones que contribuyeron más al problema tanto en su vida pública y privada.
Vida posterior
Después de retirarse del atletismo, linford continúa ganándose la atención por sus diversas actuaciones tanto en el mundo deportivo como periodístico. En 1999 pasó desde estar entre los campeones mundiales internacionales a convertirse en entraador.
Con gran sorpresa de muchos aficionados fue entonces cuando se supo que Christie y su mejor amigo y también compañero de equipo, Linford "Chalie" Christie, llegaron por separado un año más tarde para el concurso del Campeonato de la Europa de Atenas, después de haber salido con una medalla de plata.
De esta manera, la reputación deportiva de este recordado atleta no solo se basó en los múltiples triunfos deportivos. Su desafortunada vida pública le generó bastantes posibles rumores y noticias de todo tipo.
Conclusión

La vida que tuvo Linford Christie durante su larga carrera es una rica e intensiva mezcla de diversos aspectos, al estilo de una película de acción donde las acciones valientes en el deporte van lado a lado con sus conflictivas polémicas personales.
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