Qué lecciones nos deja Alejandro Gómez atleta en su despedida

La fotografía muestra a Alejandro Gómez despidiéndose del fútbol en un acto solemne

Alejandro Gómez, el galgo zaramense, se fue demasiado pronto dejándonos con innumerables recuerdos emocionantes. Aún así, quedan muchas enseñanzas que tomamos de su vida y carrera como atletas. Falleció despreciando la cáncer en junio del 2020.

Hasta el final, este entrenador dio mensaje de motivación, lección a sus alumnos sobre no rendirse ante las dificultades. El fútbol fue una parte integral en su vida y que nos dejó después de su muerte en el año 2014. Fue una vez un niño prodigio.

Durante sus últimos días, Alejandro Gómez se despidió de sus pupilos recordándoles los valores y las normas más importantes para sobrevivir en la vida, como ser fuertes ante toda dificultad. También le dijo que lucharan por lo que quieran obtener es su vida, por eso, siempre recordando su mensaje, podemos seguir aprendiendo.

La despedida de este entrenador fue única debido a las inmensas palabras de motivación de sus estudiantes que habían ido a visitarlo para saber cómo estaba. Además, el galgo del Zamáns siempre defendió valores y normas, por eso nunca se olvidaba su amistad en la vida.

Índice
  1. Perseverancia y determinación
  2. Un mensaje que nunca se olvida
  3. Una valentía infinita
  4. Un legado inolvidable

Perseverancia y determinación

Las ganancias obtenidas en nuestras vidas son solo posibles con una fuerza mental correcta así como un enfoque positivo durante las tareas. Alejandro sabía esto muy bien y siempre dijo "Sed fuertes." Así es cómo vivir correctamente para llegar al destino deseado.

Alejandro Gómez no se rindió sin luchar por su sueño de ser entrenador, a pesar de que comenzó como un niño prodigio desde pequeño con sus compañeros. Conocía lo importante que era perseverar ante las dificultades. Después de una larga batalla contra el cáncer en el cerebro y un par de veces más mal que bien, no pudo luchar.

A los atletas les mostró la vida del galgo zaramense desde sus pequeños días cuando jugaba con compañeros infantiles. Con sus 28 títulos ganados como entrenador nos demostraron para cuánto llegó su valentía y tenacidad tanto en su juego como en vida personal. No le da mucho miedo el futuro, siempre luchando.

Un mensaje que nunca se olvida

La muerte de un ser querido generalmente trae consigo mucha dolor, pero también nos hace reflexionar e imaginar las enseñanzas valiosas que él o ella nos dejaron. El fallecimiento de Alejandro Gómez atleta fue una pérdida enorme. Sus alumnos le guardan recuerdos vivos y queridos.

Durante sus última semana, antes de pasar la vida para siempre, visitando a los niños de su escuela de fútbol les dio unos consejos que podrán cumplir: sed fuertes y luchad por vuestros sueños. No te rindas nunca en tus objetivos, porque cada esfuerzo merece ser recompensado.

Con la ayuda que siempre nos da la perseverancia podemos lograr nuestra meta y el sueño con mayor facilidad. Alejandro nos quería dar su última imagen a los muchachos recordándoles las enseñanza aprendida en sus años como entrenador. Lo último que dijo es "Hasta luego", algo a lo que siempre tenemos la opción de seguir trabajando en la vida.

Una valentía infinita

Alejandro Gómez posee una expresión melancólica mientras señala al pubrico con gesto enardecido

La carrera del galgo zaramense fue larga y sufriendo una enfermedad crônica de toda vez, logró ganar muchísimos premios. A su despedida en 2014 los alumnos recuerdan mucho el mensaje final con la frase motivacional "luchad por vuestros objetivos".

Alejandro les dijo a sus estudiantes que siempre hay algo positivo en las cosas para poder superarlas, mientras tenga la valentía para enfrentar lo imposibles: luchad. Al estar ante momentos duros el galgo zaramense, ya fallecido, nos recuerda con más clara evidencia que, si perseveramos, nunca tenemos un futuro triste o oscuro.

Cada persona vivimos nuevas lecciones a lo largo de su vida, la del entrenador fue una de las más valientes y recordando estas enseñanzas es más fácil superar nuestras dificultades.

Un legado inolvidable

A Alejandro jamás se le olvida en un lugar por ser uno de los mejores entrenadores. Los valores que fajaron con su escuela aportan hoy lo mismo. El galgo del Zamáns vivió muchos años valioso para lograr mucho más cuando luchaba.

Antes que morir, nos dejó la sabiduría y un legado con sus pupilos que jamás han de olvidar que siempre deben sentirse fuertes ante el problema. La vida es un buen o mal camino, tenemos las opciones de que querer hacer pero también lo más importante es saber elegir.

Si bien este galgo falleció en busca de paz, no se perdió sin enseñanzas vitales ni tampoco para recordar lo importante que fue su carrera.

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